En las últimas semanas he traído a La Cartoteca varios ejemplos de una tecnología que, a mi entender, tiene mucho futuro. Se trata de la captura de entornos reales en forma de panorámicas esféricas para la creación de espacios virtuales navegables. Los ejemplos que he ido comentando en días anteriores guardan muchos puntos en común:
– Interface de navegación basada en mapas interactivos, como GoogleMaps.
– Inmersión en el mundo «real» a través de panorámicas interactivas.
– Capacidad para insertar información de todo tipo en las panorámicas.
En definitiva, la idea es tan sencilla de comprender como aparatosa en el paso del mundo real al virtual. No hay nada tan simple como caminar por las calles de una ciudad, pero a través de una pantalla, girando la cabeza, mirando hacia cualquier punto de la calle y encontrando un determinado establecimiento, con sus ofertas y anuncios, la catelera de un cine, el programa de un museo. Todo ello «viajando» por el entorno virtual como si de verdad se paseara por la ciudad.
Ahora bien, ¿cómo se captan y organizan los datos? He ahí la gran cuestión. Para capturar una ciudad hay que moverse con rapidez y ser eficaz a la hora de captar las imágenes que luego se utilizarán en conjunción con los mapas.
Fuente: Popular Mechanics/Headcase Design
Un reciente artículo de Popular Mechanics muestra una forma de llevar a cabo el proceso. El ejemplo se centra en la compañía canadiense Inmersive Media, especializada en captación de «vídeo esférico». La pieza principal que utiliza Inmersive Media para capturar ciudades enteras es su flota de vehículos dotados con una cámara muy especial y equipo de registro de imagen esférica capaces de almacenar en forma de panorámicas de 360º el mundo real mientras el vehículo se mueve por las calles. La información es posteriormente adaptada a la web, en conjunción con mapas interactivos. En fin, una maravilla que no ha hecho más que empezar a desarrollarse.