El Teatro de las Máquinas

láminaLas máquinas han fascinado a la humanidad desde que comenzó a idearlas. Es precisamente eso, el proceso de imaginar máquinas, aparatos y demás cacharros, lo más divertido para muchos, otra cosa es que, pasar de la idea a la realidad sea, muchas veces, poco menos que imposible. Pero como imaginar no cuesta nada, muchas personas en la historia se han dedicado a dejarnos deliciosas descripciones de máquinas geniales, maravillosas o, simplemente, monstruosas que, la mayor parte de las veces, nunca pasaron del libro o del dibujo.

Desde el Renacimiento, y durante varias centurias, estuvieron muy de moda este tipo de publicaciones que hacían las delicias de los «mecánicos» de la imaginación. Los llamados Teatros de las Máquinas, guardaban en su interior descripciones y dibujos de aparatos, a cual más extraño y asombroso, que dejaban con la boca abierta a sus contemporáneos. Poco importaba que, en general, no fueran más que delirios «mecánicos», poco relacionados con el mundo real, pues se concebía la invencion, la ciencia y la ingeniería como una especie de espectáculo. Muchos soñaron con aquellos cacharros y, he aquí la virtud de tales libros, despertaron la imaginación de algunos genios para lograr, de ese modo, construir algo verdaderamente útil. Podría decirse que estas obras, al igual que las novelas de caballería que llenaron la mente de Don Quijote, alimentaron muchos sueños imposibles y alguna que otra proeza. De entre todos ellos, sobresalen algunos, por su calidad o, simplemente, por su difusión o por tener dibujos de gran interés, como es el caso de Le diverse et artificiose machine, obra del ingeniero Agostino Ramelli, publicada en 1588. Otro Theatrum Machinarum célebre, muy difundido en Europa, fue el conocido como el libro de Bellifortis, obra de Conrad Keyser, que imaginó todo tipo de máquinas de guerra fantásticas, allá por 1405. Por cierto, no hay que olvidar que los dibujos de máquinas imaginadas por Leonardo da Vinci podrían considerarse también dentro de este grupo de divertimentos tecnológicos.

Galería de láminas procedentes de Teatros de Máquinas:
–> Diffusion of the theatrum machinarum

En la imagen: Lámina del Theatrum machinarum de G. A. Boechler