Mar fosforescente



A través de la lista de teledetección de rediris, y en concreto por la nota escrita por Ramiro A.C. de la Universidad de Vigo, me llega una información muy interesante acerca de un femómeno poco conocido:

Fenómeno Lumínico en el Mar

Un grupo de científicos ha presentado la primera detección por satélite de un fenómeno conocido popularmente como «mar fosforescente», «mar lácteo o lechoso» u otras expresiones descriptivas. Dicha detección concuerda además con el avistamiento del fenómeno desde un barco Detección de un Misterioso Fenómeno Lumínico en el Mar Un grupo de científicos ha presentado la primera detección por satélite de un fenómeno conocido popularmente como «mar fosforescente», «mar lácteo o lechoso» u otras expresiones descriptivas. Dicha detección concuerda además con el avistamiento del fenómeno desde un barco.

Desde el siglo XVII, los «mares fosforescentes» han sido asociados más usualmente con el folklore marítimo que con el conocimiento científico. Se les menciona en el clásico de Julio Verne «20.000 leguas de viaje submarino», y han alimentado la imaginación y las leyendas de la gente del mar. Hasta esta detección vía satélite, el fenómeno sólo había sido registrado en bitácoras de buques, y sus descripciones estaban sujetas a las incertidumbres de la percepción humana.

La detección fue hecha por científicos de la División de Meteorología Marina del Laboratorio de Investigación Naval, en Monterrey, trabajando con especialistas del Instituto de Investigación del Acuario de la Bahía de Monterrey, y el Centro Nacional de Datos Geofísicos.

A lo largo de estos siglos, los marineros han descrito el fenómeno del mar fosforescente como tener la impresión de estar navegando sobre un campo nevado o de deslizarse sobre nubes, siempre en la oscuridad de una noche sin luna. Las aguas brillantes parecen extenderse hasta el horizonte en todas las direcciones, y esta situación tan singular puede durar desde unas pocas horas hasta llegar a repetirse varias noches consecutivas. Los científicos creen que el fenómeno es causado por enormes poblaciones de bacterias bioluminiscentes, pero su naturaleza efímera ha hecho difícil ubicar apropiadamente a los barcos de investigación.

El caso de mar fosforescente presentado en el estudio actual fue detectado por un satélite militar estadounidense de la clase DMSP, dedicada a observaciones meteorológicas destinadas a usos estratégicos del Departamento de Defensa. Estos satélites con órbitas polares tienen un instrumento el cual fue diseñado principalmente para monitorear la nubosidad tanto bajo la luz solar como la lunar. Para lograr la detección nocturna, el dispositivo usa un sensor capaz de registrar niveles extremadamente bajos de luz visible. Este sistema ha sido utilizado para detectar fuentes de emisión terrestres y atmosféricas tales como incendios, rayos y actividad humana (luces de ciudades, barcos de pesca, etc.) por todo el mundo. Sin embargo, no había informes previos o demostraciones concretas de su uso para detectar bioluminiscencia.

Los investigadores buscaron testimonios de avistamientos de los «mares fosforescentes» desde 1992, y los compararon con los archivos de datos satelitales. Una nave mercante británica, el S.S. Lima, navegaba por el noroeste del Océano Índico en la noche del 25 de enero de 1995, cuando se encontró con el «mar fosforescente». Las imágenes por satélite recolectadas aproximadamente 30 minutos después del avistamiento inicial desde el buque, revelaron una gran región de emisión lumínica de bajo nivel. Las aguas brillantes abarcaban un área de más de 15.000 kilómetros cuadrados, y duró al menos tres noches. El evento tuvo lugar en el noroeste del océano Índico, aproximadamente a 280 kilómetros de la costa de Somalia. Los límites geográficos del fenómeno concordaban con mucha exactitud con los partes del barco anunciando su entrada en la zona del fenómeno y su salida del mismo.

Se cree que los mares fosforescentes son manifestaciones inusualmente fuertes de bioluminiscencia producida por colonias de bacterias asociadas a microalgas en la superficie de las aguas. De todos modos, el fenómeno todavía no puede ser explicado plenamente sobre la base de las características conocidas de ningún organismo emisor de luz.

El artículo original, puede ser consultado en la web del Laboratorio de Investigación Naval de los Estados Unidos:

http://www.nrl.navy.mil/pressRelease.php?Y=2005&R=51-05r